lunes, julio 10, 2006

EL AMOR ES UN PERRO INFERNAL.

Según los antiguos la mujer pertenecía a la sección oscura del universo, su naturaleza era monstruosa, reptiliana, húmeda y secreta. La mujer era el agente de la guerra, ligado a la fluidez salivante del maguey, mayahuel, su ciclo coincide con la duración de los meses y los sacrificios rituales comandados por la luna, alba dama desmembrada, quien intentó eliminar al sol, el varón. Hay en el sexo una remembranza de estas hostilidades litúrgicas, entre dos muslos femeninos, el macho acude a un páramo de violencia y convulsiones, es un legionario astral, como en la cosecha del mayahuel, recolecta el fluido que después le servirá para embriagarse, el hombre intenta regresar al conducto primordial, túnel de útero y origen hacia las transmutaciones del submundo y vértebra genital, esencia de una criatura oscura, pero, como sucede en el sacrificio, elemental para reestablecer la conexión divina en la génesis de su belicosidad.

3 comentarios:

"El gran dictador" dijo...

buen blogg luego te veo..saludos

Anónimo dijo...

Sequimos malditos por el hechizo sexual de la posima de EVA, .

Carnalón dijo...

que buen culo!!! tssssssssss