sábado, julio 15, 2006

SCI-FI.

Siempre que estoy al lado de una cosecha sucede igual, me pasan cosas, señales, dirían algunos; la realidad es que las cosechas contienen la esencia misma del planeta, tal y como le fue revelada a los antiguos, particularmente a los habitantes de Mesoamérica. Hoy, gracias a la mala reputación de la Ciencia Ficción, para nuestra mente occidental, incapaz de entender metáforas, no podría ser de otra forma, volvemos a encontrarnos cerca del mismo camino de comprensión. No es SCI-FI, sino más bien arte aislado y puro, el de H.R. Giger en quien se pueden hallar similitudes tremendas, y muy probablemente no intencionales, con el estilo Puc de los mayas clásicos conformando así una alegoría que me apetece más clasificar de “Cósmico-Orgánico”. A través de todo esto y como pasa en las cosechas entendemos a la tierra como un ser vivo, una astronave de carne en la que nosotros transitamos en la ruta marcada por la galaxia. El signo de esta astronave es la muerte, al igual que en las cosechas, la siembra se prepara hacia su fin para alimentar a los seres vivos, nosotros somos la cosecha del planeta, nos hace crecer para nutrirse de nuestra muerte.
http://www.system75.com/gallery/giger/images/Landscape_XIV.jpg

2 comentarios:

Gerardo de Jesús Monroy dijo...

Saludos de parte de otro admirador de H.R. Giger.

astroblema saudádica dijo...

Tamez